Nadie me lo puede negar. Desde que la semana pasada nos avisaron en clase que a partir de mañana vendrá el fotografo para hacernos la foto de la orla, quien más y quien menos ha ensayado ante el espejo su mejor sonrisa. Una sonrisa, que en mi caso y creo que también en el de casi 27 personas más, reflejará nerviosismo, satisfacción y felicidad en el mismo instante que suene el flash de la cámara. Demasiados sentimientos para un solo segundo.
No es la primera orla que me hago pero casi con toda seguridad sí será la última. Que si me dejo el pelo suelto o recogido, que si me maquillo poco o mucho, que si no nos podemos olvidar la camisa blanca, que si la toga no me pega, que si nunca me he puesto corbata, que si sonrío demasiado o poco… Muchos ‘que si’ que no nos dejan disfrutar de un momento verdaderamente ansiado por todos y que, creo que a muchos, nos está abriendo lo ojos a una realidad que no queremos ver: solo nos quedan 4 meses para licenciarnos y que todo esto acabe. Y cuando digo «todo» no me refiero a examenes, madrugones, falta de sueño, prácticas, tesina, ordenadores que fallan…(que también). Sino a TODO lo que llevo compartiendo cuatro años (con algunos) y dos (con otros) día a día y que enumerar aquí sería imposible, además de eternamente pesado para todos los que me leen y no entienden ni por asomo de lo que les estoy hablando.
Elegir a los 6 profesores (de Periodismo) que queremos que aparezcan no ha sido fácil. Con una media de 10 asignaturas por año y, teniendo en cuenta que en primero y segundo teníamos asignaturas comunes con Comunicación Audiovisual y Publicidad, a mi tampoco me salen las cuentas. Pero finalmente el premio ha sido democrático y haciendo uso de la votación, los premiados han sido: David Polo (Documentación), Maria Luisa Notario (Periodismo Comparado), Reyes Domínguez (Teoría de la Comunicación), Juan Ángel Jódar (Tecnología), César Villegas (Relaciones Internacionales) y Rosario Pérez (Lenguaje y Literatura). Un premio a la dedicación, las ganas de enseñar, la ilusión de cada día, la preparación de cada clase y lo que nos han sabido transmitir. Si yo fuera alguno de ellos, me sentiría orgulloso.
Las orlas marcan un instante entre lo que eres y lo que serás. Algunas acabarán colgadas en insignes despachos, otras en íntimas habitaciones, las habrá que queden enrrolladas y atadas con una simple gomilla pero en todas ellas estarán las caras de un increíble grupo de licenciados en periodismo que llegaron a la primera meta que se marcaron. Las siguientes dependerán del camino que tome cada uno pero eso ya dá para otro post…
El blog de Irene Azcutia 
He terminado de leer: pelos de punta. No soy ninguna de esas 27 personas y tampoco hemos compartido paredes durante estos dos años, pero ha llegado el momento (¡click! ¡foto!) y para mí, es como si lo viviéramos juntas. «Todo final es otro comienzo», nunca se me olvida tu frase. Las burbujas despegan, pero yo nunca me olvidaré de cuando empezamos a soplar para ser nuestro propio viento (yo seguiré soplando por si algún día lo necesitas 🙂
Creo que nunca he sentido tantas cosas a la vez en tan poquito tiempo. En el flash de la cámara he visto todos los momentos que hemos vivido en estos cuatro años y sé que cuando mire vuestras caras en las orlas recordaré un instante con vosotros. Gracias por ser tan especial!! un besito!
Un orgullo haber sido vuestro profesor. Lo digo de corazón. Con algunos más que con otros, claro está. Peeero con todos una gran pizquita 😉 Irene Jerez, Clara Cádiz… y las 2 viviendo sus momentos tras el flash. Me quedo con ese momento burbuja que todos hemos vividos: FLASH! Y el tunel del tiempo se abre en tus recuerdos…